EMDR Y TDAH
Hoy he
recibido una llamada interesante, una madre, de profesión profesora de
secundaria, me ha expuesto su preocupación:
“Hace unos
años que diagnosticaron a su hija de TDA, ha ido de un especialista a otro,
psicólogos, neurólogo/as, neuropediatras…
En ese
deambular, le han ofrecido pautas, técnicas, medicación…, algunos en la misma
línea y otros en diferente.
En casa, le
ofrecen tiempo para que realice sus tareas, tiempo para que juegue,
comprensión, amor… pero se encuentra que en el centro educativo presenta muchas
dificultades:
- En la calidad de su faena: Sus trabajos suelen ser pobres, incompletos, con una presentación inadecuada, aunque en ocasiones pueda hacerlos bien. Es muy dependiente del ambiente (organización, estructuración y supervisión)
- En la cantidad de la faena: con frecuencia no acaba sus tareas, exámenes…
- En la velocidad: trabaja más poco a poco que los otros compañeros, no revisa las faenas y cuando lo hace tiene gran dificultad para detectar los errores cometidos en la ejecución.
- En el rendimiento: puede variar significativamente de un momento a otro, incluso de un día a otro.
- En la automotivación (autorefuerzo): le cuesta mantener el esfuerzo en tareas o actividades que no le propician una recompensa inmediata. Necesita refuerzo y recompensa frecuentes e inmediato, aunque sean irrelevantes.…
- En la regulación del nivel general de alerta, es decir, para centrarse en las demandas del ambiente y del momento (lo que ocurre aquí y ahora). Tienen dificultades para iniciar el trabajo que tiene que hacer, evitar la distracción y mantenerse atentos en situaciones monótonas. Con frecuencia parece que sueñen despiertos o que estén en las nubes, cuando se supone que tienen que estar atentos, concentrados y centrados en una faena.
Su pregunta,
resumiendo ha sido:
Puede la
terapia EMDR curar el TDAH, de mi hija???
La terapia
E.M.D.R. no curará T.D.A.H. con origen biológico. Sin embargo, algunas veces
los diagnostican erróneamente con T.D.A.H., pero el problema es realmente
causado por recuerdos no procesados que producen síntomas que imitan aquellos
de T.D.A.H. Por ejemplo, la inhabilidad para concentrarse, ansiedad,
poca atención, híper-activación, nerviosismo, impulsividad y conductas
impulsivas (acting out) también pueden ser síntomas de un evento traumático u
otras “experiencias de vida adversas”. De igual manera un clínico
capacitado en el uso de terapia E.M.D.R. debe de ser capaz de ayudar a
determinar si se tratan de experiencias perturbadoras no procesadas. Estas
experiencias pueden ser factores causales o contribuyentes.
Adicionalmente,
aquellas personas que han sido diagnosticados correctamente con T.D.A.H. están
expuestos a una variedad de experiencias que agravan el problema. Esto incluyen experiencias de fracaso en el
colegio, rechazos, humillaciones y otros tipos de interacciones causadas por
falta de atención, sobreactividad y déficits de control de impulsos que
caracterizan este trastorno.
Estos
sistemas de memoria no procesada también son la base de como los individuos con
T.D.A.H forman y moldean su sentido de sí mismos. Pueden percibirse como no
siendo lo suficientemente buenos o competentes o adecuados y pueden sufrir de
sentimientos de vergüenza, ansiedad y depresión. Las redes de memoria que
tienen dicha información, son la base para como perciben y responden ante
experiencias y retos presentes. Mientras continúan debilitándose ante
sentimientos negativos, nuevas experiencias de fracaso se acumulan y siguen
haciendo que las cosas empeoren. La terapia E.M.D.R. puede usarse para procesar
recuerdos de experiencias negativas, que pueden ayudar a reducir los síntomas
causados por la ansiedad y promover el desarrollo saludable sentido del sí
mismo y competencia.
En resumen,
la terapia E.M.D.R. ayuda a individuos con un mal diagnostico de T.D.A.H. al
tratar directamente los factores causales y procesar los recuerdos del trauma y
la adversidad que están en el núcleo de los síntomas similares a los de
T.D.A.H. Además, en el caso de T.D.A.H. con base biológica, la terapia E.M.D.R.
puede usarse en conjunto con los tratamientos aceptados para tratar el T.D.A.H.
, tratando los factores psicológicos contribuyentes que exacerban